Sin lugar a dudas las rosas son una de las flores más apreciadas en todos lados y contribuyen a darle un toque especial a cada jardín, porque permite disfrutar de su fragancia y color. Sin embargo, para garantizar un crecimiento saludable y una floración exuberante, es fundamental elegir el momento adecuado para plantar.
La mejor época para sembrar rosas en el jardín es durante los períodos coincidentes con la llegada de la primavera en muchas regiones, lo que proporciona un clima más cálido y favorable para el crecimiento de las plantas. Durante esta época, las temperaturas comienzan a elevarse, lo que estimula la actividad biológica del suelo y facilita el enraizamiento de las rosas.
Además de la época del año, la ubicación es muy importante para el éxito de las rosas. Se deben colocar en un lugar que reciba abundante luz solar, idealmente de 6 a 8 horas al día. Un buen drenaje también es esencial, ya que las rosas no toleran el encharcamiento; el suelo debe ser fértil y estar bien aireado para promover un crecimiento saludable.
Antes de plantar es conveniente enriquecer la tierra con compost o abono orgánico para mejorar su fertilidad. También es recomendable realizar pruebas de pH para asegurarte de que el suelo sea ligeramente ácido a neutro, lo que favorecerá el crecimiento de las rosas. La preparación del terreno es un paso clave que no puede pasarse por alto.