En una Argentina cara en dólares, son cada vez más las personas que cruzan al país vecino, aunque sea por un día para realizar algunas compras.

La diferencia cambiaria, la variedad de marcas, la cercanía y los precios son el gran llamador ya que, por ejemplo, en Chile un par de zapatillas de marca Adidas puede conseguirse a $36.000 (pesos argentinos); mientras que en cualquier centro comercial mendocino, el mismo par puede costar por encima de los $80.000.

 Cuando se habla de tecnología las diferencias también son notables, un teléfono de alta gama y de los más nuevos del mercado, en Chile pueden costar entre $700.000 y $800.000 (argentinos). En nuestro país, se estima que uno de los últimos teléfonos pueden superar los $1.500.000 según la marca del mismo y el modelo.

Compartí la noticia