El vacío que dejó la imprevista e injusta partida de «Carly» Amieva no es fácil de dimensionar, al estupor de la noticia original más el dolor palpable en el aire del último adiós en la necrópolis local, le han seguido una serie de homenajes de distinta índole aunque tal vez ninguno tan justo como imponer su nombre al «Centro de Entrenamiento de Beach Volley», ubicado en el albergue deportivo municipal de ésta Ciudad.
La rica historia del voley de Tunuyán sumó desde hace algunos años este fenómeno del beach voley, haciendo que al pié de la cordillera surgieran camadas de jugadores que, vaya logro impensado, han dado hasta ahora dos medallistas olímpicos y, en el mundo del deporte amateur, eso es escribir la historia con letras de oro.
La ceremonia vivida en la noche de este Viernes 18 de Marzo fue realmente impactante, resultó muy difícil tanto para los presentes como para quienes la pudieron vivir en directo gracias a la impecable transmisión de CTC/TVA poder abstraerse de la emoción que transmitieron las palabras de su compañero de aventuras, Emir Andraos, quién se despojó de la función pública para intentar ponerle palabras a la emoción y el dolor que cruzaban a todos.
«Carly» ya no está fisicamente, no hay dudas que si en un sitio especial su espíritu estará dando vueltas, es en ese lugar que desde anoche, lleva su nombre.
Foto tomada del muro de Heliana Mocayar