La música de Astor Piazzola, un verdadero revolucionario musical de los años 60 y que al día de hoy mantiene plena vigencia sonando cómo compases del Siglo XXI, inundó el Auditorio Jorge Raúl Silvano.

La presentación,dentro del ciclo «Música Clásica por los Caminos del Vino» del quinteto de vientos y batería «Brasstor», dejó plenamente satisfecho a la gran concurrencia que a cambio de una caja de leche en polvo pudo disfrutar un espectáculo musical poco habitual en nuestra Ciudad.

Clásicos cómo «Fuga y Misterio» y «Milonga del Angel» compartieron aire con la menos conocida «Zita», que forma parte del álbum que Piazzolla le dedicara a su admirado Anibal Troilo.

En defintiva, un muy buen espctáculo musical acompañado de simpáticos comentarios de los interpretes, que dejaron más que satisfechos al numeroso público presente.

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